Aeropuertos y estaciones, maletas y ordenadores portátiles, agendas apretadas y horas muertas… Incluso para las personas que viajan por placer, los viajes de negocios pueden suponer una dosis extra de estrés e incomodidad. ¿Cómo logran enfrentarse a ello los viajeros frecuentes?
Si aplicas estos 5 secretos, sobrevivir a un viaje de negocios no solo será más fácil sino que ¡además es posible que lo disfrutes!
- Prepárate concienzudamente. Cuanto más sepas sobre tu viaje, más sencillo te resultará hacerlo. Antes de salir, investiga la ciudad, el barrio en el que está tu hotel, las ubicaciones de tus reuniones… Cada destino esconde multitud de posibilidades que solo descubrirás a tiempo si viajas preparado.
- Haz que tu maleta sea un salvavidas. Además de seleccionar la ropa que necesitas para tus reuniones y los productos de higiene, prepara una pequeña lista de accesorios que puedan contribuir a aprovechar las horas de NO trabajo para hacer que tu viaje sea más agradable. Unos tapones pueden ayudarte a descansar durante el trayecto, mientras que un reproductor mp3 con tu música favorita te ayudará a desconectar después de un día de estrés. ¿Te gusta correr? Lleva tus zapatillas para salir a conocer la ciudad y disfrutar de tu deporte favorito. Cada persona tiene necesidades distintas, ¡aprende a identificar las tuyas!
- No te deshagas de tus rutinas. Tanto si te gusta leer antes de dormir o mantener una dieta sana, no deberías saltarte esas cosas que haces a diario para encontrarte mejor. Planifica con antelación estas cuestiones, y recuerda que si es necesario puedes consultar con tu alojamiento la posibilidad de hacerlo más fácil. ¡Estarán encantados de ayudarte a mejorar tu experiencia!
- Busca alguna actividad que te ayude a relajarte y desconectar. Si eres una persona social, puedes salir a tomar algo con algún compañero. Una persona más introvertida quizás necesite un buen baño antes de cerrar la jornada. Conocerte a ti mismo es la clave, así que no dejes de probar opciones hasta que encuentres tu estilo. Te despertarás más animado y disfrutarás más del día que tienes por delante.
- Cuando todo falle, sonríe. Cuando las cosas se tuerzan y tu vuelo sufra un retraso, tu reunión no salga como esperabas o te hayas olvidado de algo que necesitas, recuerda que una actitud positiva ante las dificultades puede ponértelo más fácil.
¿Cuáles son tus imprescindibles para sobrevivir a un viaje de negocios? ¿Tienes algún secreto que te ayude a hacerlo mejor?